Esta semana volvemos a recomendar cine español con uno de nuestros directores favoritos. Isaki Lacuesta (Los Condenados, Cravan vs Cravan) nos trae Entre dos aguas Concha de Oro en San Sebastián. Y además no nos pensamos perder la esperada vuelta de Steve McQueen (Shame, Hunger) 5 años después de 12 Años de Esclavitud con Viudas.
También estaremos pendientes de la nueva película de Arnaud Desplechin, aunque últimamente no está acertando demasiado con nosotros pero aún recordamos con cariño la fantástica Un Cuento de Navidad (2008). Y Hotel Explotación: Las Kellys documental sobre la precariedad laboral de las camareras de piso.
ENTRE DOS AGUAS
Isaki Lacuesta
Isra y Cheíto son dos hermanos gitanos. Cuando Isra sale de la cárcel y Cheíto termina una larga misión enrolado en la marina ambos regresan a la Isla de San Fernando. El reencuentro de los hermanos renovará el recuerdo de la muerte violenta de su padre cuando eran niños. Han pasado doce años desde La Leyenda del Tiempo, la primera película de Isaki con los hermanos Isra y Cheíto.
VIUDAS
Steve McQueen
Adaptación cinematográfica de Las viudas, miniserie británica de 1983, aquí ambientada en Chicago en la actualidad, sobre cuatro mujeres con nada en común excepto una deuda heredada por las actividades criminales de sus difuntos maridos. Verónica (Viola Davis), Alice (Elizabeth Debicki), Linda (Michelle Rodriguez) y Belle (Cynthia Erivo), deciden tomar las riendas de su destino y conspiran para forjarse un futuro con sus propias reglas.
LOS FANTASMAS DE ISMAEL
Arnaud Desplechin
Cuando se prepara para rodar su siguiente película, la vida del director de cine Ismael (Mathieu Amalric) sufre un vuelco con el regreso de Carlotta (Marion Cotillard), un amor de hace veinte años. La inesperada aparición de su antigua amante pondrá además en peligro su relación con Sylvia (Charlotte Gainsbourg), su novia actual.
HOTEL EXPLOTACIÓN: LAS KELLYS
Georgina Cisquella
Más de doscientas mil mujeres trabajan como camareras de piso en España. Hace dos años, en octubre de 2016, las Kellys (tan fundamentales como invisibles en el sector de la hostelería) decidieron organizarse para reclamar sus derechos. Han sido víctimas de la externalización y muchas de ellas se han quedado fuera de las plantillas de los hoteles, sin derechos y expuestas al despido cuando están de baja.
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